Capítulo 7 -UCDM -Libro de Texto-1ra Parte

Primera Parte

LOS REGALOS DEL REINO

I.- El último paso

Te comunicas plenamente con Dios, tal como Él se comunica contigo. Es éste un proceso continuo que compartes con Él, y por el hecho de que lo compartes, te sientes inspirado a crear como Él crea. En la creación, no obstante, no existe una relación recíproca entre tú y Dios, ya que Él te creó a ti, pero tú no lo creaste a El. Cap.7 I.1.2:4

Él creó la Filiación y tú la expandes. Cap. 7.I.2.6

Tú eres parte de Dios, tal como tus hijos son parte de Sus Hijos. Crear es amar. El amor se extiende hacia afuera simplemente porque no puede ser contenido. Cap. 7.I.3.2:4

El ego por otra parte, siempre exige derechos recíprocos, ya que es competitivo en vez de amoroso. Cap. 7.I.4.1

Lo que tú crees ser determina los regalos que haces, y si  Dios te creó extendiéndose a Sí Mismo hasta dar lugar a lo que eres, sólo puedes extenderte a ti mismo tal como Él lo hizo. Cap. 7.I.5.2

Pensar como Dios es compartir Su certeza acerca de lo que eres, y crear como Él es compartir el Amor perfecto que Él comparte contigo. Hacia esto te conduce el Espíritu Santo, para que tu dicha sea total porque el Reino de Dios es integro. Cap. 7.I.6.1:2

El Espíritu Santo, no obstante, tiene la tarea de traducir lo inútil a lo útil,     lo que  no tiene significado a  lo  significativo  y lo temporal a lo eterno. El espíritu santo  puede,  por  consiguiente,  decirte algo acerca de este último paso. Cap. 7.I.6.5:6

Dios no da pasos porque sus obras no se realizan de forma gradual. No enseña,  porque Sus creaciones son inalterables. No hace nada al final, porque El creó primero y para siempre. Debe entenderse que la palabra “primero”, cuando se aplica a Dios, no es un concepto temporal. Él es el primero en el sentido de que es el primero en las Santísima Trinidad. Cap. 7.I.7.1:5

Es el Creador Principal por qué creo a Sus co-creadores. De ahí que el tiempo no le ataña a Él ni a lo que Él creó. Por lo tanto, el “último paso” que Dios dará fue cierto al principio, es cierto ahora y será cierto eternamente. Lo que es eterno está siempre presente porque su ser es eternamente inmutable.Cap. 7.I.7.6:9

II.- La ley del Reino

En el Reino ni se enseña ni se aprende porque en él no hay creencias. Tan sólo hay certeza. Dios y Sus Hijos, en la certeza de ser, saben que eres lo que extiendes. Esa expresión de la ley no se puede adaptar a nada porque es la ley de la creación. Dios Mismo creó la ley al crear mediante ella, y Sus Hijos, que crean de la misma manera que Él, la acatan de buen grado sabiendo que la expansión del Reino depende de ella, tal como de ella dependió su propia creación. Cap. 7.II.3.4:9

III.- La realidad del Reino

El Espíritu Santo enseña sólo una lección y la aplica a todo el mundo y en toda circunstancia. Dado que Él está libre de conflictos, aprovechar al máximo todos los esfuerzos y todos los resultados. Al enseñarte el poder del Reino de Dios, el Espíritu Santo te enseña que todo poder te pertenece. Cap. 7.III.1.1:3

Estar en el Reino quiere decir que pones toda tu atención en él. Mientras sigas creyendo que puedes prestar atención a lo que no es cierto, estarás eligiendo aceptar el conflicto. Más ¿es esto realmente una elección?. Parece serlo pero las apariencias y la realidad no pueden ser lo mismo. Tú que eres el Reino, no tienes nada que ver con las apariencias. La realidad es tuya porque tú eres la realidad. De esta manera es como en última instancia tener y ser se reconcilian en tu mente, no en el Reino. Cap.7.III.4.1:7

IV.- La curación como reconocimiento de la verdad.

La verdad sólo puede ser reconocida y necesita únicamente ser reconocida. La inspiración procede del Espíritu Santo, y la certeza de Dios,  tal como lo estipulan Sus leyes. Ambas cosas, por lo tanto, proceden de la misma Fuente, porque la inspiración procede de la Voz que habla a favor de Dios, y la certeza de las leyes de Dios. Cap. 7.IV.1.1:3

La curación no procede directamente de Dios, quien sabe que Sus creaciones gozan de perfecta plenitud. Aun así, la curación sigue siendo parte del ámbito de Dios porque procede de Su Voz y de Sus leyes. Cap. 7.IV.1.4:5

Curar,  por consiguiente, es  una  manera  de  abordar  el conocimiento  pensando de acuerdo  con las leyes  de  Dios y reconociendo  su  universalidad. Sin  este reconocimiento,  haces  que  esas leyes  no signifiquen  nada  para  ti. Cap. 7.IV.6.9:10

V.-  La curación y la inmutabilidad de la mente

Interés en el texto del libro

El cuerpo no es más que un marco para desarrollar capacidades, lo cual no tienen nada que ver con el uso que se hace de ella. Cap. 7.V.1.1:2

La capacidad de curar es la única capacidad que cada persona puede y debe desarrollar si es que ha de curar. Curar es el medio de comunicación del Espíritu Santo en este mundo, y el único que acepta. No reconoce ningún otro porque no acepta la confusión que el ego tiene entre mente y el cuerpo. Cap. 7.V.3.1:3

El verdadero aprendizaje es constante, y tan vital en su poder de producir cambio que un Hijo de Dios puede reconocer su propio poder en un instante y cambiar el mundo en el siguiente. Ello se debe a que al cambiar de mentalidad, produce un cambio en el instrumento más poderoso que jamás se le haya dado para cambiar. Esto no contradice en modo alguno la inmutabilidad de la mente tal como Dios la creó, pero mientras sigas aprendiendo a través del ego creerás que has efectuado un cambio en ella. Esto te pone en una situación en la que tienes que aprender una lección aparentemente contradictoria: tienes que aprender a cambiar de mentalidad con respecto a tu mente. Solo así puedes aprender que tu mente es inmutable. Cap. 7.V.7.5:9

  • Los párrafos y versículos compartidos corresponden al Libro de Texto del Capítulo 7  desde el Párrafo I al V.
  • Los textos son a modo indicativo, sobre el tema. Solo el texto completo, te dará una mejor comprensión.

Capitulo 6 Libro de Texto


One thought on “Capítulo 7 -UCDM -Libro de Texto-1ra Parte

Deja un comentario

Copyright © Soy Tu Clave 2024